Cada año me gusta más la vuelta al cole. El entusiasmo por un nuevo curso, por descubrir qué proyectos deparará la rentrée y recuperar el orden de la rutina me llena de energía y expectación los primeros días de septiembre. La nostalgia del sabor del verano va dando paso a una época de comenzar de nuevo después de tomarme los días necesarios de transición. Y en este tiempo rescato el espíritu escolar para renovar mis útiles de papelería, investigar sobre nuevas herramientas, dejarme sorprender por novedades que apoyen mi trabajo, faciliten y embellezcan los procesos.
Este año comienzo el curso con una nueva libreta pensada especialmente para arquitectos y diseñadores. A:LOG es una herramienta que combina una guía de básicos para mi trabajo con un cuaderno de hojas sutilmente impresas de guías punteadas en cuatro escalas diferentes para dibujar, pensar y diseñar de manera más intuitiva.
Para escribir y dibujar, elijo un portaminas Kaweco de bolsillo, ultraligero y muy cómodo de usar. La casa alemana de estilográficas edita este modelo Sport en diferentes acabados con un diseño que se mantiene fiel al original de 1935 cuando lanzó la primera serie de utensilios de escritura de bolsillo, de tamaño reducido pero de altas prestaciones. Forma octogonal y minas de 0,7 mm para esbozar, tomar notas y plasmar ideas en cualquier momento.
Y entre los últimos descubrimientos digitales, una aplicación que me ayuda a identificar los colores de la pintura para los ambientes que diseño. Con la facilidad de tomar una foto con el iPhone, Color Finder de la casa Valentine identifica el color de cualquier objeto o superficie, señalando el punto concreto e identificando la referencia concreta dentro de su catálogo. También sugiere combinaciones a partir del color base de forma armónica y guardar tus preferidos en una biblioteca personal.